Probablemente todos hicieron sus propósitos de Año Nuevo, además de los propósitos personales, esto es lo que te propongo para vivir una sexualidad más libre y placentera este 2020.
1. Dale prioridad a tu placer. Nuestro deseo y nuestra sexualidad son tan importantes como otros aspectos de nuestra vida. Convierte la sexualidad en una de tus prioridades, solemos pensar que el encuentro erótico es algo que solo sucede espontáneamente y a altas horas de la noche (no necesariamente es así), como cualquier otra cosa que merezca la pena, la sexualidad requiere que le dediquemos tiempo, estrena tu agenda 2020 y escribe en ella tus metas sexuales, puedes programarte para experimentar un orgasmo. Así como nos programamos para trabajar y pasar tiempo en familia o con los amigos, necesitamos tomarnos tiempo cada semana para nutrir nuestra vida sexual.
2. Conoce, explora, acepta y ama tu cuerpo. A veces pensamos que el orgasmo es algo que nos ocurre por arte de magia, pero hace falta practicar y practicar para controlar nuestro propio placer, un punto de partida es conocer nuestro cuerpo y tomarte unas vacaciones de las críticas corporales, a un cuerpo juzgado y criticado le es mucho más difícil sentir placer que a un cuerpo amado y aceptado. Conocer tu cuerpo te ayudará a identificar las zonas que resultan más placenteras, y podrás guiar a tu pareja para que te de placer. Un ejercicio practico es observarte en desnudez frente a un espejo de cuerpo completo, prestando atención a cada parte de tu cuerpo.
3. Erotiza tu vida cotidiana. El camino que recorremos antes de hacer el amor es tan importante como el destino mismo, invierte tiempo y dedicación para incrementar tu pasión y deseo, pon en juego todos tus sentidos y permítete percibir eróticamente el mundo que te rodea, desde el momento en que despiertas asúmete sensual, siente el roce de las sábanas en tu cuerpo y el sabor dulce de la fruta en tu boca al momento de desayunar. Alimenta el deseo y tu potencial erótico en el transcurso de tu día, escucha música sensual, huele flores, perfumes, o velas acompañadas de un baño con agua caliente.
4. Mantente sexualmente ejercitado. El músculo que no se usa se atrofia. No esperemos que nuestro cuerpo este en forma sino practicamos ejercicio con regularidad, lo mismo pasa con nuestra sexualidad. El autoerotismo, la autoestimulación o la masturbación es una excelente practica que nos ayuda a mantenernos en forma, se ha demostrado que la masturbación: previene la sequedad y la degeneración del tejido vaginal, es una forma de descubrir dónde y cómo te gusta que te toquen o te den placer, enseña como alcanzar el orgasmo y permite trasladar este aprendizaje a la relación sexual, los hombres aprenden a controlar su eyaculación, constituye un relajante muscular que ayuda a liberar tensión, entre otros beneficios.
5. Fantasea más seguido. El fantasear eróticamente puede aumentar la intensidad de nuestro deseo. Así como la sexualidad es una parte inherente del hecho de ser humano, las fantasías sexuales son parte integral de nuestra sexualidad, en mi siguiente blog escribiré más sobre este punto, y sobre lo que debes saber para llevar a cabo tus fantasías, no te lo pierdas.
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